
En plena oleada de cierre de empresas de motos eléctricas, hay quienes saben hacer su 'agosto', pero en abril. Es una empresa con sede en España, y ha roto todos sus pronósticos. Y los de otros también, por comparación. Es Start Future.
Han ha logrado algo inédito en el sector de las dos ruedas eléctricas: alcanzar beneficios en tiempo récord y consolidarse como un actor global apenas dos años después de iniciar sus ventas. El dato es elocuente: han superado incluso a Tesla en velocidad de crecimiento hacia la rentabilidad.
¿Un referente para la industria eléctrica?
Stark Future ha registrado en abril su mayor volumen de ingresos mensuales hasta la fecha, alcanzando los 18,3 millones de euros. Lo más llamativo es que, además de facturar a buen ritmo, ha conseguido un EBITDA positivo de 2,8 millones de euros, algo que ni Tesla ni otras grandes del sector eléctrico lograron tan rápido, según Rideapart.
De la tierra al asfalto. Buena parte de este éxito se debe a la Stark VARG, una moto de motocross eléctrica que ha tenido una gran acogida entre los aficionados al off-road. Sin embargo, la compañía ha dado ahora un salto clave con la llegada de la VARG EX, una versión homologada para circular por carretera que se posiciona como moto de enduro.
Anton Wass, fundador y CEO de Stark Future, destaca que este punto de inflexión llega apenas 24 meses después del inicio comercial de la empresa. "Nuestro crecimiento se asemeja más al de las grandes firmas tecnológicas que al de los fabricantes tradicionales", aseguró en declaraciones recogidas al citado medio.
Más rápido que Tesla… y NIO. Y eso ya es decir. Para entender la magnitud del logro, basta con mirar al espejo de los gigantes del vehículo eléctrico. Tesla tardó 17 años en alcanzar beneficios sostenidos. La china NIO, dedicada a coches eléctricos y con un modelo de negocio también muy centrado en producto, necesitó ocho años. Stark Future lo ha hecho en dos.
Más categorías, mismo objetivo: superar a la combustión. Según Paul Soucy, director técnico de la empresa, el objetivo ahora es claro: llevar la revolución eléctrica a todas las categorías del motociclismo. "Seguiremos innovando tanto en componentes como en el desarrollo de nuevos modelos, para que las motos eléctricas puedan superar a las tradicionales en todos los aspectos", afirmó.
¿Un nuevo estándar para el futuro en las motos eléctricas? Que están de capa caída, en muchos casos. El caso de Stark Future demuestra que la rentabilidad y la innovación no son excluyentes en el mundo de las dos ruedas eléctricas. En lugar de competir por precio o por subvenciones, esta startup ha apostado por producto, diseño y experiencia de usuario, y los resultados ya están a la vista.
Imágenes | Stark Future